jueves, 26 de mayo de 2011

El informe Pieczenic

Un ex alto funcionario del Departamento de Defensa estadounidense afirma que Osama Bin Laden murió en 2001 e insiste en que los acontecimientos del 11 de septiembre fueron un montaje.

El ex alto funcionario del gobierno de EE.UU., Dr Steve R. Pieczenik, un hombre que ocupó numerosos cargos de influencia bajo tres diferentes presidentes y todavía trabaja para el Departamento de Defensa, expresó conmocionado al periodista Alex Jones que Osama Bin Laden murió en 2001 y que él estaba preparado para testificar frente a un gran jurado cómo un general superior le dijo directamente que el 11 de septiembre era una bandera falsa de trabajo interno.

Pieczenik sirvió como Subsecretario de Estado bajo tres administraciones diferentes, Nixon, Ford y Carter, mientras también trabajó para Reagan y Bush (padre), y todavía trabaja como asesor para el Departamento de Defensa. 

También sirvió como planificador de políticas de alto nivel bajo los Secretarios Henry Kissinger, Cyrus Vance, George Schultz y James Baker, y trabajó en la campaña electoral de George W. Bush en contra de Al Gore. Su expediente señala el hecho de que él es uno de los hombres más profundamente conectados en los círculos de inteligencia en las últimas tres décadas.

En abril 2002, hace nueve años, Pieczenik le dijo al periodista Alex Jones que Bin Laden ya estaba “muerto desde hace meses”, y que el gobierno estaba esperando el momento políticamente más oportuno para lanzar su cadáver. Pieczenik estaría en una posición para saber, pues conoció personalmente e a Bin Laden y trabajó con él durante la guerra de poder en contra de los soviéticos en Afganistán en la década de los 80. 

jueves, 3 de febrero de 2011

Respuesta a la diatriba del diario La Nación de Buenos Aires

Si ya esta fuera de línea, ver editorial aquí 



Me resulta imposible mantenerme en silencio, cuando la indignación golpea mi conciencia. Callarse ante la infamia es hacerse cómplice de ella y eso no es falta de coraje sino cobardía.  
Hay momentos en la vida de los hombres que el desafío es irrenunciable y avasallador. Momentos en que la provocación mueve a la reacción y acallarla ya no es cobardía sino traición.
Hace 46 años que vivo en este país y siempre he pensado lo mismo, pero nunca como hoy me he visto en la necesidad de gritar a  los  vientos, una verdad que mantenía la quietud que le impone la prudencia y que no se agitaba por la sensatez que obliga la cordura  cuando se está en casa ajena además del respeto que merecen aquellos que por no conocer ni ser responsables  pueden sentirse mortificados sin merecerlo.
En momentos de agitación, enfrentamientos, sangre y muerte en la Argentina, Francisco Solano López hijo del presidente del Paraguay Don Carlos Antonio López, y luego de la batalla de Cepeda en la que Mitre ve derrotado a su ejercito por el de la Confederación al mando de Gral. Urquiza; el que seria luego presidente del Paraguay, como mediador voluntario. oficioso y eficiente, logra imponer la paz con el Pacto de San José de Flores, en cuya plaza en la actualidad se recuerda el memorable acontecimiento. Por el resultado de su gestión fue ovacionado el entonces Coronel Francisco Solano López por la población agradecida de Buenos Aires, cuyos habitantes a su paso  le arrojaron flores.